“La Habana carece de Historia (...) los más viejos inventan otra historia, mentirosa, como debe ser (...) entre La-Habana-que-no-existe y La-Habana-paraíso-perdido.”

Abilio Estévez

Simultáneamente, el P. Martín Garmendia cumplió su doble periodo de Superior de la casa y ello obligó a hacer un cambio. El P. Garmendia salió de Cuba con destino a otro país. Y fue nombrado Superior el P. Gregorio Urquiola, residente en Popayán (Colombia). Este salió para la Isla Caribeña el 10 de diciembre de 1959, el mismo día en que en Bogotá, a las 12 m. se inauguraba el nuevo aeropuerto Eldorado, durante el mandato del General Rojas Pinilla.

Ahora el autor de esta crónica habla en primera persona… Me tocó salir, no del nuevo aeropuerto el Eldorado, sino del viejo aeropuerto de Techo, en un avión de la Compañía Avianca. En Miami (USA), después de larga espera, un avión de la Compañía Cubana de Aviación nos recibió a los pasajeros con destino a Cuba. Como se ha dicho, estaba Fidel Castro en el poder. El aterrizaje en el aeropuerto de la Habana-Rancho Boyeros -a altas horas de la noche, fue normal. Cumpliendo con los trámites de rigor, -requisa agregada- al salir del aeropuerto puede observar la presencia del P. Segundo Urquía que me esperaba para llevarme en coche a la nueva residencia de la Calzada de Bejucal. A la mañana siguiente pude encontrarme con los demás miembros de la comunidad: Manuel Oyarbide, Martín Gorostidi, Julio Sampedro, Ignacio María Eguibar y Vicente Urquía.

La comunidad contaba ya con una casa nueva y una capilla amplia con terraza encima. La vida de la comunidad transcurrió normalmente, sin más contrariedades que las que imponía el calor sofocante de La Habana. La revolución en marcha…

Continuara…

Padre Gregorio Urquiola, sss
Bogotá, Colombia, NOTIBIP 73 - Septiembre 2021