Me siento tan bendecido de haber sido parte de nuestra Familia Eymardiana que asistió al 53° Congreso Eucarístico Internacional celebrado en Quito, Ecuador, del 8 al 15 de septiembre de 2024. Fue una semana de solidaridad llena de gracia y espíritu.
Fue espiritual, con celebraciones eucarísticas diarias en una capilla o en un estadio, cantos y bailes espontáneos, charlas, novenas, testimonios, confesiones y procesiones... en una variedad de lenguas y de naciones. Independientemente del lugar, se sentía la comunión.
Fue Social, con más de 5000 personas representando a unos 53 países. El Congreso Eucarístico Internacional fue un encuentro mundial en el que se compartieron historias, convicciones, esperanzas y promesas: ¡que mediante la unidad y el esfuerzo podemos transformar el mundo y a nosotros mismos! La gente compartió sus historias de transformación al transformar las condiciones de vida de los demás. Las charlas abarcaron desde una familia italiana que lo dejó todo en su privilegiado estilo de vida para servir a una comunidad pobre de Ecuador, hasta un obispo dispuesto a viajar por el río Amazonas para servir a una comunidad nativa.
Fue Especial, más de cincuenta Religiosos y Laicos del Santísimo Sacramento nos reunimos en el carisma de San Pedro Julián Eymard. Partimos el pan y compartimos el cáliz en el Centro de Retiros Instituto de Misioneras Seculares "Nuestra Señora del Quinche". Fuimos a la mitad del mundo (el ecuador) y unimos nuestras manos como unimos nuestro espíritu. Experimentamos tres de los cinco temas de nuestros retiros de Vida en la Eucaristía, en tres idiomas y con un solo corazón.
Mi fe se ha fortalecido, mi compromiso se ha intensificado y mi corazón rebosa de amor y gratitud por la Eucaristía, por toda mi familia eymardiana y por el mundo entero.
Mona Grigsby-Suarez, Codirectora del CEE
Provincia de Santa Ana - EE.UU.
